lunes, 9 de febrero de 2015

Sencillamente

Yo solo quiero vivir,  vivir de forma sencilla. Que se me pegue la almohada por la mañana, estirar las piernas y escuchar a los pájaros piar a través de la ventana.

Quedarme un rato en silencio, como acurrucado en la vida, y luego levantarme y ser quien quiera.

Hoy seré un cantante, un superheroe o un villano! Pero será un juego al que jugamos para no hacernos tanto daño, para poder dejarnos caer, para dejarnos llevar.

Yo quiero una vida sencilla, sentarme al lado del trigo y sentir la tierra, poder sentir que estoy aquí, imaginarme que me uno a través de un sentimiento de amor a todo lo que me rodea. Pensarme rama, roca, nube, ser ave, árbol, montaña.

Encontrar en silencio una palabra de gracias por lo que me rodea, acariciarla entre mis manos y lanzarla hacia dentro de mi

Volverme invisible, pero estar en todas partes, lleno de un calor blanco y puro.

Liberarme del dogma, del juicio. Del juicio a las otras personas, a sus máscaras o sus fachadas.

Dar todo lo que en mí quepa, todo el amor, toda la fuerza.

Solo quiero vivir de forma sencilla, libre, porque anhelo cuando era un pájaro, cuando volaba por encima de las cosas. Cuando la tierra no me rozaba, ni me arañaban las mejillas las palabras de tu boca. Cuando oía tu nombre y acudía ligero el viento a darle fuerza a mis alas.

Es tu amor y el mío lo que anhelo, el mío por que se fue ajando, el tuyo por que es tuyo, ES TUYO, y jamás lo he tenido. He sentido su aroma, sus besos, sus palabras sinceras. Me he bañado en tu amor, y de él he bebido día y noche. Pero ¡es tuyo!, el mío yace aquí, conmigo, con todo.

Y tantas veces te quiero, tantas veces te espero y tantas veces te he vivido, amor, que ya solo espero una vida sencilla...

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